Viajando por el sur de Chile, dejando atrás Villarrica, y pasado Pucón, encontramos un complejo de suites de lujo, ubicadas en un sector llamado Corredor Biológico Namoncahue; aquí los viajeros pueden disfrutar de la tranquilidad de la montaña, y conectar con la naturaleza. Llegamos a Lemu Lodge de Caburgua, donde nos encontramos con Jorge Gallo, el Gerente del Lodge, que nos invita a disfrutar del maravilloso complejo. Nos atiende muy amablemente y charlando con él, descubrimos la historia del Lodge y visitamos las instalaciones del recinto.

 » Lemu, en el idioma ancestral de la población indígena de la zona, quiere decir “Bosque”. Encontramos que venía como anillo al dedo, se nos ocurrió instalarnos en el bosque. Los mapuches a esto le llaman “lemu”. Así que instalamos un glamping. ¿Qué es el concepto glamping? Es un camping con glamour. Porque nuestras suites son de lujo, con loza radiante, con colchones y camas de hotel 5 estrellas, con espacios impresionantes, con terraza privada. Sigue siendo una carpa, porque la estructura como tal es de tela. Una tela especial. Es anti inflamable, con todos los beneficios y todos los avances que la tecnología nos puede brindar, con respecto a este tipo de tela. Es una tela de una súper carpa, que nos aísla acústica y térmicamente del entorno. Así que los días de mucho calor no tenemos suites acaloradas, y los días de mucho frío tenemos oasis de tibieza en cada suite. Es hermoso salir a la terraza las noches frescas (estamos en la ladera de un volcán extinto que era el Volcán Caburgua). Acá las temperaturas llegan a ser bajo cero, nieva en el invierno, en las noches siempre baja la temperatura. Viene el contraste de montaña, o sea, podemos llegar a 30 grados durante el día, y a 8-9 en la noche. Y ese contraste es un diferenciador muy importante para la armonía de la vida. Tenemos la suite que la prendemos cuando empieza a bajar el sol, y cuando se van a acostar es una maravilla. La distribución de la Suite, para mantener el contacto con la naturaleza, tenemos la ducha al aire libre. Sales a un lugar protegido visualmente, pero sales a fuera para ducharte. Y el agua es tan caliente que se hace como una especie de sauna, nunca encuentras el contraste del frio, porque sales a una especie de cámara de vapor , donde tu ducha está a una temperatura de 30 grados por lo menos para poderte dar duchas largas. Realmente es un agrado vivir en este bosque, en estas estadías que puedes obtener en Lemu Lodge.
Estamos ubicados en un sector de Caburgua, que es dentro de la comuna de Pucón, que es la ladera del antiguo volcán Caburgua. A partir del pueblito que nos acoge y nos acompaña, que está en el lago con el mismo nombre, nosotros diferenciamos dos playas de acceso público, son la playa Negra y la playa Blanca. Son todas arenas volcánicas. Por eso una es más negra y la otra por la corriente del mismo lago se ha blanqueado más. Una vez que llegas a Pucón, nosotros estamos ubicados en el camino a Playa Blanca, en un sector protegido por la Conaf y por la Unesco, que se llama Corredor Biológico Namoncahue. Es un término mapuche que quiere decir “pasos de piedra”, porque es un camino de piedra, que va subiendo al cerro. Al final de este camino hay una reserva muy importante en número de ejemplares de araucarias. Por eso estas instituciones internacionales se han preocupado de proteger este hábitat. Acompañar a la Conaf, que es el organismo nacional encargado de la flora y fauna del país, acompañarlo en esta ardua tarea de preservar los lugares naturales. Tenemos el privilegio de estar en mitad del camino de piedras, en Namoncahue, que lleva la reserva de la biosfera de araucarias. El lugar lo encontramos privilegiado, apartado de todos, y realmente el contacto con la naturaleza es impresionante. Tenemos un lago con un salto de agua entre las suites, la gente lo disfruta. Tenemos termas muy cerca y las visitan poco en relación a lo que obtienen acá. Hay una tina privada en cada terraza. El agua es del río, que nosotros temperamos, una vez que la tienes en tu suite, a 30-32 grados de temperatura, no quieres ir a otra terma (risas). Después tenemos una piscina para que puedan recrearse en las tardes. Es un lugar que tiene senderos muy lindos, con fauna y flora nativa, hay copigües, blancos, rojos. A parte de ser la flor nacional, el copigüe no es fácil de encontrar, en la naturaleza, en otros sectores. Generalmente están en sectores inaccesibles, donde esta enredadera puede vivir a gusto en las sombras de los árboles. Así que tenemos unos caminos con unas plantas también originarias del pueblo mapuche, que las usaban como consumo, el tallo de esta planta se come, es parte de la dieta mapuche, y las hojas tiene fines para cocinar, para cubrir alimentos, es impresionante la variedad de usos que le ha dado el pueblo mapuche a este árbol. Y después tenemos canelos, que son árboles sagrados para los mapuches, hasta palosanto, que son árboles que hablan de su energía. Nuestras Suites tienen nombres de árboles, Canelo, Arrayán, Ulmo, cada uno en su entrada hay uno que hace referencia al nombre.

Nuestras suites son todas desmontables, si bien tienen una terraza de madera, la estructura en un par de días se puede sacar y no quedan vestigios de la intervención humana en el bosque, porque las bases donde se apoya la casa es un sistema extraíble que inventaron los dueños, diseñan las estructuras, y llegaron a un sistema extraíble de estos cimientos donde descansa la suite. Se extraen y lo único que queda es un pequeño orificio en la tierra pero sin cementos, sin fierros, sin nada que deje un vestigio del paso del hombre. Tenemos un sistema que biodegrada las aguas servidas grises, las blandas. Son unas plantas que en las raíces tienen bacterias que degradan el jabón, entonces en los productos químicos que se pueden usar en el lavaplatos, lavamanos, se biodegradan, se los comen estas bacterias, y es agua que se vuelca a la tierra porque sirve para regar. En las aguas servidas duras hay un proceso de biodegradación a través de lombrices y de plantas incluso de tomates, se plantan unos tomates, pasan por terrazas, y estas aguas terminan saliendo aguas cristalinas. Eso es el aporte que hacemos al medioambiente, estamos con la mínima intervención negativa, pero vivimos armoniosamente, con los pajaritos, con las alpacas, con las ovejas, con las abejas, y los turistas eso lo disfrutan.
Tenemos un club house donde es el corazón del Lodge, donde hacemos la recepción hasta donde tenemos el living, que el turista puede venir a sentarse y leer, descansar, o tomar algo rico, hasta el comedor, para servir almuerzo, cenas o los mismos desayunos. Tenemos una política de desayunar relajadamente y tardíamente, con desayunos abundantes, y muy variados, con yogur, frutas, café, se sirve de todo. Aquí disfrutan de cafetería abierta todo el día. Tenemos un servicio de carnes a la parrilla en la terraza. Compartimos con los huéspedes, nosotros les servimos, y el personal comparte también con el huésped, porque nosotros les servimos pero nos sentamos con ellos y compartimos experiencias. Todo el personal que tenemos acá es gente madura y de mundo, gente que ha vivido en otros países, gente que ha estado del otro lado del servicio. Disfrutándolo, conociéndolo, enriqueciéndose, es gente preparada, cultos, con manejo de muchos idiomas, entre todos hablamos acá como 10 idiomas fluidamente. Termina siendo un agrado porque el personal que te atiende, les interesa saber las experiencias, y las comparten entre ellos. Termina siendo cada noche una tertúlia con cena, y unos cafés interminables (risas), la gente lo disfruta.
Nuestro Lodge en isla de Pascua es Rapa Nui, aquí trabaja uno de los venerables ancianos, jerárquicamente es su linaje aborigen, es una persona muy respetada, un estudioso en su cultura. Él participa con los huéspedes y les cuenta cómo llegó el primer rey a la isla de Pascua, y cómo formó su familia, historias que te acercan a esa cultura,  para que cuando veas el Moai no sólo veas un pedazo de piedra, sinó que entiendas lo que representa y por qué está en esa posición o por qué mira para este lado. Nosotros cuando llegamos a isla de Pascua, como una empresa preocupada de hacer aportes a la comunidad, hay una sección que hay varios Moais, que es la base donde se paran unos Moais. Ofrecimos iluminarlos para mejorar un poco el entorno y el consejo de ancianos dijo que no, que no podíamos iluminar los Moai porque de noche los ancestros tenían que descansar. Yo lo encontré fantástico. ¿Qué le vas a decir? Tienen razón. Si esa es su cultura, y ellos representan algo viviente. No es solo una piedra. Cada Moai es un ancestro que se fue, que no está entre nosotros pero quedó ahí en la isla. Y para ellos se les rinde culto, respeto… Eso se lo enseñamos al turista, y entonces los miran con otros ojos. Y lo mismo pasa acá con los mapuches. Si bien no hay una presencia de mapuches en el servicio porque no queremos hacer un show de una cosa tan internalizada, en una cultura un poco olvidada o relegada. Siempre lo respetamos, por eso no tenemos empleados mapuches. Sería como ponerlos como monitos de exhibición. Nosotros respetamos su cultura, respetamos su historia, y tenemos un sistema que los llevamos a un pueblo que se llama Curarrehue donde hay un museo de mapuches, y nosotros eso lo tenemos como un servicio para los huéspedes. Cuando lo piden más de 4 personas es sin costo. Les llevamos hasta allá, les enseñamos el museo, comemos unas empanadas echas por mapuches que ellos venden, y después volvemos para acá. Es un tema que nos ponemos de acuerdo con nuestros huéspedes, lo mismo que los senderismos. Cuando se hacen recorridos de senderos ponemos un guía profesional, de la carrera de ecoturismo, que acompaña a los huéspedes en el recorrido, les va explicando los pájaros que están cantando, les muestra el nombre de las plantas, les explica los árboles que hay, y a la vez van paseando por un bosque maravilloso.
Esas cosas son parte del día a día del Lemu Lodge.

Venir a descansar: Lemu Lodge.
Venir a hacer actividades: Lemu Lodge.
Venir a conocer la cultura mapuche: Lemu Lodge.
Yo creo que es una interesante elección para los viajeros.»

 

 

 

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