Filipéndula Ulmaria.
Forma parte de la familia de las Rosáceas.
La Ulmaria es una planta herbácea, que pueden llegar a tener 1 metro de altura aproximadamente.
Se encuentra en prados húmedos y de hierba alta, a orillas de los arroyuelos, al borde de las corrientes de agua, en la parte norte de la Península, desde los Pirineos de Olot hasta Galicia, así como en los valles de las montañas de la mitad septentrional del país, en Beira, Extremadura, Sierra de Gredos, Guadarrama, Moncayo, etc. Es menos usual en la cuenta mediterránea.
La Ulmaria florece en los meses de verano.
La parte que se utiliza son las sumidades floridas, y se recogen en su máximo esplendor y en verano.
Es conocida también por el nombre de La reina de los prados.
Poca gente sabe que esta planta es la que ha dado nombre a la famosísima “aspirina”, cuyo nombre es un diminutivo del término Spirea (Spirina). El término Spirea se refiere a que sus frutos están enrollados en forma de hélice; el nombre de Ulmaria, por su parte, indica que sus hojas se parecen a las del Olmo.
Los druidas centroeuropeos la consideraban una planta sagrada.
La Ulmaria contiene en sus partes herbáceas, salicilato de metilo y aldehído salicílico, que se obtienen por destilación.
En las sumidades floridas/florales se forman también aldehído salicílico, salicilato de metilo y ácido salicílico libre, así como cantidades imponderables de vanilina y heliotropina, y además el glucósido gaulterina. En el rizoma se encuentra también la gaulterina, junto con el fermento gaulterasa, y salicilato de metilo.
Contiene derivados flavónicos (espireósido, que es un glucósido del quercetol (quercetol-4 glucósido), e indicios de heliotropina. Glucósidos (contiene heterósidos como spiraeósido o monotropósido, el cual mediante la acción de una beta-glucosidasa presente en la planta, se descompone en primaverosa y salicilato de metilo. Este último le profiere el olor característico).
Aceite esencial (0,2%) compuesto por salicina, gaulterina (salicilato de metilo-2-primaverósido) y espireína (aldehído salicílico-beta-D-glucósido), así como por otros derivados salicílicos. Contiene además vainillina, ésteres, ácido cítrico, taninos pirogálicos, antocianos y antocianidinas. Además, se han encontrado flavonoides como avicularina y piperósido.
La propiedad principal de la Ulmaria es antiinflamatoria (gota y afecciones reumáticas), analgésica, antipirética, anticoagulante. Diurética, y diaforética (sudorífica) (por su contenido en flavonoides). Discretamente astringente, por lo que es recomendada en casos de diarrea, especialmente en los niños. También es antiespasmódica (sobre todo en el tejido bronquial) y se emplea en caso de tos espasmódica y como tratamiento complementario del asma.
Indicada en fiebre, afecciones gripales, resfriados, Urolitiasis, reumatismo, hiperuricemia, gota, oliguria, edemas, cistitis, uretritis, inflamaciones articulares y en la prevención de tromboembolias y arteriosclesosis.
Contraindicada en: hipersensibilidad a los salicilatos. En casos de úlceras gastroduodenales, hemorragias activas o cuando se sigan tratamientos con anticoagulantes o hemostáticos.
La usaremos en:
Infusiones a razón de una cucharadita de postres por 250cc de agua. Se tomarán hasta dos tazas al día. Tomar con precaución ya que en altas dosis puede resultar ser tóxica. Y después de las comidas.
Por vía externa, es astringente y vulneraria. Se aplica en forma de compresas para el tratamiento de los dolores articulares de naturaleza reumática.
Por: Marta Sunyer (Fitoterapeuta, Naturópata y Nutricionista)