En Chile hace años que podemos encontrar productos españoles en los comercios; el origen y la calidad son dos de los valores que los clientes priorizan más. En Santiago de Chile se estableció Jaime Sartorius, un madrileño que bajo su propia marca «Las Bellotas», trae a Chile jamón puro de bellota de España. Pero su iniciativa no termina aquí, así que hemos ido a hablar con él para que nos cuente sobre sus proyectos sociales en Chile.

«Mi familia es casi toda de Madrid. Algunos viven acá en Chile, como la hermana de mi madre con mi tío y mis primos. El resto viven entre Madrid y Comillas (Cantabria) y también en Extremadura.
Hace algunos años, decidí emprender un viaje por tierra desde España hasta Chile para dar a conocer los productos ibéricos españoles extremeños, a la par que ver de qué manera podía poner mi granito de arena en la sociedad. Después de partir de España y viajar durante algunos años, primero en un jeep, después en una moto, después en una bicicleta y finalmente a pie por África, pensé que la mejor forma de ayudar sería construir escuelas para niñas y niños con escasos recursos económicos. Para ello, decidí crear una empresa capaz de financiar dichas escuelas. Así que comencé a vender jamón ibérico de bellota en distintas partes del mundo. Creé una marca que se llama Las Bellotas, que desde hace tres años, distribuye jamón ibérico de bellota en los distintos restaurantes, hoteles, tiendas y empresas de Santiago.
Con los recursos que genera esta empresa, yo busco terrenos para construir escuelas de verano de mil alumnos. En estas escuelas, durante el mes de febrero, les enseño docencia, valores universales, oficios y talleres de toda índole. La docencia se la imparten alumnos de universidades del país, que vienen durante un mes a dar clase de las distintas materias. Los valores se los enseñamos entre todos y los oficios se los enseñan profesionales de distintas áreas con apoyo de los voluntarios. Los oficios consisten principalmente en enseñar a los niños formas de ganarse la vida sin necesidad de verse sumidos en la rueda del capitalismo. Les enseñamos a trabajar la huerta, gasfitería, electricidad, a arreglar zapatos, a cortar el pelo, a manejar una mesa de mezclas, bisutería, a tejer, a reparar maquinaria industrial, gastronomía, a cocinar, un amplio abanico de rubros para que ellos se puedan desenvolver en la vida.

Mi proyecto es construir 40 escuelas en Chile, de mil alumnos cada una, porque pienso que si todos los años se enseñan a 40 mil niñas y niños de entre 10 y 18 años, todas estas materias y oficios, después de unos años, este país podría pegar un buen avance socio cultural, reducir la delincuencia y ayudar a una masa crítica de jóvenes a conectarse con ellos mismos.
El mes de febrero es el mes más indicado para esto, ya que no interfiere en el calendario escolar, además de proporcionarles a muchas familias una forma de que sus hijos salgan de casa durante el mes de febrero, se relacionen, disfruten, aprendan y crezcan espiritualmente.
La Fundación está partiendo, se llama Fundación Escuela de la Vida, yo personalmente he tenido algunos problemas con obtener el visado porque el Gobierno piensa que no justifico ingresos suficientes para ello ya que no soy muy amigo del dinero. Pero a pesar de ello estamos terminando de crearla con el apoyo de muchos, en especial con el de mi abogado y amigo José Miguel Ferrada y mi tío Gerardo Larraín que ha aportado el terreno donde estamos empezando a levantar el invernadero, el huerto y la zona de talleres.
De momento tengo una web que es www.lasbellotas.cl a través de la cual ofrezco los distintos productos ibéricos de bellota que elabora mi familia en España e importo desde allá. Me centro principalmente en las charlas motivacionales para empresas e instituciones de toda índole, tanto para clientes de empresas como para empleados de empresas, les enseño que nada es imposible con perseverancia, ganas y un objetivo claro. A todas las empresas les resulta muy útil.
En estas charlas yo narro mi experiencia de los últimos años que me trajo a Chile por tierra y después hasta España de vuelta por África. África la recorrí a pie con un bastoncito, estuve 6 meses caminando, desde Sudáfrica hasta Guinea Ecuatorial,  conviviendo con todos los animales y con todas las tribus que encontraba a mi paso, con las cuales siempre trataba de pasar algunos días e intentaba entender qué les motivaba y cuál era su cultura para no interferir con ella a la hora de enseñar a los niños en las distintas escuelas que creara.
De los productos “Las Bellotas” salen los medios económicos para realizar todo esto. Yo considero que en los países donde voy a realizar este proyecto, el consumo de estos productos va a ser suficiente como para construir el número de escuelas necesario en cada uno de los países. Espero a lo largo de mi vida construir 10 mil escuelas y quizás algún día derrocar el capitalismo absurdo en el que estamos sumidos.
Para mí, tengo una visión del dinero absolutamente atípica. Yo no veo el dinero como lo ve la demás gente. A mí el dinero no me gusta, no me interesa, para mí el dinero es exactamente igual que el papel higiénico, es decir es necesario, pero si tu vecino necesita papel higiénico no tienes problemas en pasárselo. Tienes papel higiénico en casa, pero no tienes cuartos llenos de papel higiénico. Tienes el papel higiénico que necesitas y un poquito más por si es necesario. Pero nunca nadie tiene problema en compartir el papel higiénico. Pero la importancia del dinero se ha ido de las manos. Hoy en día no se sabe ni de dónde viene, ni quién lo crea, ni cuánto hay, la gran mayoría de las personas no saben generarlo, ni administrarlo, mientras que hay otras personas muy preparadas que pueden hacer lo que quieran con miles de millones de dólares. Es un horror lo que se hace hoy en día. El ser humano, yo pienso que para vivir en paz no necesita más que alimentarse, respirar, compartir, conversar, amar… y hoy en día no se hace nada de todo eso. Uno sale a cualquier ciudad, le cuesta respirar, nadie se comunica con nadie, se alimentan terriblemente mal, con azúcares, grasas saturadas… A mí lo que me gustaría es que un montón de niños pudieran dilucidar juntos la forma de hacer las cosas mejor y de dejar de vivir en esta locura de vorágine, de humo y despilfarro de recursos naturales, ya que al final todo esto nos va a pasar factura. Lo que pasa que sabemos que a ninguno de nosotros nos va a tocar ver determinadas cosas, ojalá, pero no es sostenible. Muchas personas no son ni siquiera conscientes del problema.
Hay mucha gente de la que nadie espera nada, muchos de ellos son personas sin recursos, en riesgo social y a mí me gustaría trabajar con todos ellos. Dicen que es más complicado pero a mí no me lo parece. Yo creo que cuando se muestra un camino sano a una persona tan perdida, se aferra a él bien fuerte. Creo que podremos conseguir cosas bien interesantes juntos.
La primera escuela la estoy construyendo acá en Chile, en Chacabuco, a 40 minutos de Santiago, en un campo que me presta mi tío. La idea es que en un futuro todas las escuelas se puedan ir construyendo en diferentes lugares, es decir que cualquier persona pueda vender, arrendar o ceder un terreno para construir la escuela y ahí se construye un pozo, un pequeño invernadero, una huerta orgánica, una zona para dar clases y lugares para enseñar y aprender los distintos oficios y talleres, como yoga, teatro, cetrería, programación, astronomía, kung fu.
Es bien bonito y me gustaría que este primer año fuera una buena demostración de lo que se puede lograr con este tipo de escuelas.
La forma en la que intento que las empresas colaboren, no es donando nada, me encanta el trueque, y yo lo que hago es ofrecer a empresas diversos productos y servicios a cambio de las cosas que va a ir necesitando la escuela. Entonces a las empresas lo que les ofrezco son charlas motivacionales, regalos corporativos o degustaciones de producto y son un éxito. Las degustaciones de producto consisten en un almuerzo, merienda o cena, también puede ser desayuno, para cualquier número de personas entre 20 y 2000, con un proyector, durante una hora y media imparto una degustación de todos los productos ibéricos de bellota, desde el primero hasta el último, en combinación con distintos panes artesanales de masa madre, y en ocasiones también con vinos. Y les muestro a todos cómo se elaboran estos productos y además de disfrutarlos profundamente, les cuento todo mi proyecto, y suele ser bastante divertido y enriquecedor.»

 

Contacto email  jaime@lasbellotas.cl

Eventos y comunicación  Srta Mariana, mariana@lasbellotas.cl

 

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Desde el Magazine vamos a sortear 3 cajas de regalo de los productos Las Bellotas, gentileza de Jaime para nuestros lectores.

 

3º Premio: Caja de Regalo Ibérica: Valor aprox. $30.000

Sachet Jamón Ibérico
Sachet Paleta Ibérica
Sachet Chorizo Ibérico
Sachet Salchichón Ibérico
1 Sobrasada Ibérica

2º Premio: Caja de Regalo Bellota: Valor aprox. $60.000

Sachet Jamón Ibérico Puro de Bellota
Sachet Paleta Ibérica Pura de Bellota
Sachet Chorizo Bellota
Sachet Salchichón Bellota
1 Sobrasada Ibérica
1 Fuet Ibérico

1º Premio: Caja de Regalo Pata Negra. Valor aprox. $100.000

Sachet Jamón Ibérico Puro de Bellota
Sachet Paleta Ibérica Pura de Bellota
Sachet Lomito Ibérico Puro de Bellota
Sachet Jamón Ibérico
Sachet Paleta Ibérica
Sachet Chorizo Bellota
Sachet Salchichón Bellota
1 Sobrasada Ibérica
1 Fuet Ibérico
1 Chorizo Bellota Vela

 

Para participar, cliquen «Me gusta» en nuestro Facebook, ahí encontrarán cómo pueden ser los ganadores de estos tres exquisitos premios.

Habrá tres ganadores. Los participantes deben enviar las respuestas correctas por email info@aldiaconespanaychile.com

o enviarlas por inbox de facebook.

Este concurso está dirigido exclusivamente a chilenos y españoles.

Las preguntas que deben responder correctamente los participantes son las siguientes:
– ¿Cuál es el icono representativo de la marca Las Bellotas, y qué aparece en las dos primeras imágenes del inicio de su página web?

-¿Cuántas escuelas quiere construir Jaime en Chile, y cuántos paquetes de jamón sostiene en la foto de la entrevista?

¡Mucha suerte a todos!